Cada día es más importante tener un buen SEO y hoy os voy a contar un poco mi experiencia con una revista que dirigí que tuvo unas cuantas visitas diarias en inglés.
Si me leéis habitualmente (sé que no, pero tengo tantas cosas con qué deprimirme que para qué) sabréis que hace tiempo dirigí una revista enfocada al público americano y la estrategia que seguimos (en realidad la que pudimos) fue la de aprovechar nuestro posicionamiento SEO, que era bueno.
Sí, la revista comenzó con principios, ideas y pensando en James Joyce por mi parte pero luego me di cuenta que un artículo (originariamente Famous Birthdays Today, ¡qué tiempos!) daba muchas visitas basándonos en las keywods empleadas y demás. Tampoco voy a descubrir todas las cartas, que no se me va a ir la lengua, vamos, pero puedes posicionarte decentemente en determinados temas en determinadas partes del mundo usando los nombres adecuados. Así, lo que empezó siendo un asunto entre artistas y literatura y arte y esas cosas terminó siendo lo que ahora mismo ha llegado al resto del mundo y, que, gracias a tipos como yo, se ha extendido (no tengo la culpa, es como echarle la culpa a Google de algo, no sirve para nada).
Hoy leo en un respetable medio español (El País) un artículo titulado Mourinho v Trump: preguntas alternativas. ¡Qué recuerdos! ¡Qué buenos tiempos y qué recuerdos de facultad! Sí, aquel profesor que enseñaba a no poner gerundios o cosas (tan importantes) por el estilo. Sí, tengo conocidos de ésos que se compran el periódico en papel para sabe Dios qué fines malévolos (ellos hacen que lo leen, aún no termino de creerme cómo puede ser mejor la crónica de un partido de fútbol en papel que ver los goles en el ordenador, pero allá cada uno con su imaginación).
Pues lo que comenzó siendo un proyecto bonito, para artistas y demás se convirtió por unos meses en una máquina (relativa, no éramos en NY Times, que nadie vaya a pensar) de hacer visitas. Resumen: ¿James Joyce o Donald Trump? Para que os hagáis una idea, un post en esta página sobre Donald Trump da unas treinta o cuarenta veces más visitas que cualquier otro tema. Total, que casi que no tengo elección y es aquí cuando nos topamos con la pregunta: ¿alguien la tiene?
En esa misma facultad se estudiaba una mandanga que llamaban Agenda Setting o no sé qué. Era como ver de qué temas se hablaba. ¡Pues de Donald Trump! ¿De quién si no? Imagínense si a mí me da visitas, las que le puede dar a El País o al NY Times, y Trump lo sabe mejor que Julio Iglesias así que nos da una historia cada día con la que llenar nuestros medios, blogs o como queráis llamarlos.
Y al final importa una sola cosa: las visitas. Y ya seamos El País o la New York Magazine (que también cambió sus contenidos para adaptarse a los nuevos tiempos) o el nuevo periódico surgido de la nueva era, el Huffington Post, todos nos adaptamos a la tiranía de las visitas y una cosa llamada SEO que sí, tiene que ver con el número de clicks que al final pincha la gente (el factor humano interviene) pero que tiene que ver con otros muchos factores con los que tipos como yo jugamos y hacemos nuestras pequeñas tretas.
Al final el sistema se nos vino abajo por un cambio de política en el gran buscador y las visitas ya no eran tantas. Total, que mi socia me dejó pero me lo tomé muy, muy bien (qué odio que le tengo, jeje). Meses después, las cosas volvieron a su cauce salvo que me quedé sin periódico y sin las consiguientes visitas.
Y comento esto porque esos artículos de Ian Somerhalder vs Donald Trump eran nuestra especialidad. ¡Las visitas que daban los muy condenados! Separados daban pero juntos… visitas de las buenas.
Hubo anécdotas divertidas, como cuando nos equivocábamos en el lugar de nacimiento de algún famoso… Comentario: ¡pero qué falta de rigor informativo! Sinceramente, ni que nos importase mucho el lugar de nacimiento de éste o aquél, el tema era conseguir visitas.
Y parece ser que ya no soy yo el único (ahí nos queda la moraleja, sea la que sea).
