Cristiano Ronaldo mostró ayer en el derbi una extraña baja de forma y el madridismo empieza a mostrar su preocupación.
Cristiano Ronaldo nos tiene acostumbrados a aspavientos, alguna que otra salida de tono, a protagonizar todo tipo de memes… pero no a mostrarse ‘fallón’ en tantos partidos seguidos y eso preocupa, y mucho, entre la afición blanca. El que seguramente será el próximo Balón de Oro no está en su mejor momento ni su velocidad es la que era (es normal, yo a los veinte años también era otra persona) pero parece que la condición de super-estrella del fútbol comienza a eclipsarse aunque, seamos sinceros, ya nos ha callado la boca a muchos en diversas ocasiones (y seguramente lo volverá a hacer pero… ¿cuántas veces más?).
Las virtudes de Cristiano son muchas y esas muchas virtudes se sustentaban en dos pilares: el talento y, sobre todo, el físico. Vamos a decirlo ya, son 32 años y unos cuantos rindiendo al máximo nivel. ¿Qué más se le puede pedir? Puede que no seamos madridistas pero sus cifras hablan y no creo que ni Kubala ni Di Stefano fuesen los mismos con 30 años que con 19.
Como tampoco lo es Messi, que ya no se regatea a todo el equipo para meter un gol a lo Maradona, no. Las cosas cambian y poco a poco nos tenemos que preparar para que los dos astros dejen su lugar a los que están por venir que, aunque no vayan a ser tan buenos probablemtne, seguro que nos harán disfrutar.
Parece una época que se acaba, sí, y las cosas no duran para siempre (aquí es cuando suelo hacer chistes sobre los matrimonios, pero hoy no estoy cruel) y parece que la MSN se fue, que la BBC es ya parte de otra época y que el fútbol, como todo en la vida, cambia y deja espacio, mal que nos pese, a otras estrellas y a otras formas de entender este deporte.
Como empiezo a hacerme viejo, recuerdo el día que debutó Del Piero y hasta la Copa de Europa de Koeman y cuando Raúl ganaba las Champions… pero son tiempos pasados y, a día de hoy, el Real Madrid debería pensar en un cambio generacional. Echadle un ojo a la edad de los jugadores, aunque sea por curiosidad.
El tiempo pasa y los días en los que Cristiano y Messi se repartían los Balones de Oro, pasarán en breve.
